marzo 24, 2007

PELIGRAN LAGO PUELO Y EL BOLSON


CONTROVERTIDA INICIATIVA

Un proyecto de construir una represa amenaza la zona de Lago Puelo y El Bolsón

La obra está en los planes de la empresa española Endesa, que opera en Chile a través de varias centrales hidroeléctricas y que tiene desde 1990 los derechos de agua sobre la totalidad del caudal del río Puelo. Su construcción impactará el ambiente y la economía a ambos lados de la cordillera.

(Télam) Por Alejandro San Martín

La empresa española Endesa, que opera en Chile varias centrales hidroeléctricas y que tiene desde 1990 los derechos de agua sobre la totalidad del caudal del río Puelo, anunció su intención de construir una represa de 103 metros de altura en esa cuenca binacional, lo que produciría impactos ambientales y sociales a ambos lados de la cordillera.

El proyecto de represar el río Puelo impactará fundamentalmente en el clima, con consecuencias para las actividades agropecuarias de la zona, por la alta tasa de evapotranspiración que producirá el gran espejo de agua, la atenuación de la temperatura media de la cuenca y el incremento de la humedad relativa, según expresaron los especialistas.

“La represa es una de las problemáticas ambientales que afectan la región y obedece a una visión de desarrollo que no tiene en cuenta el ambiente, que ideológicamente es visto como un barril sin fondo donde uno puede sacar sin parar”, señaló Alejandro Nebbia, del Centro de Formación, Investigación y Documentación y de la Red de Educadores Ambientales de la Argentina.

La cuenca binacional del río Puelo ocupa una superficie aproximada de 880 mil hectáreas, 300 mil de las cueles se ubican del lado chileno y 580 mil del argentino, constituyéndose en uno de los complejos hídricos más importantes de la Patagonia.

Del lado argentino, el lago Puelo donde se asienta el Parque Nacional está conformado por tres ríos de montaña cuya única salida de desagote es el río Puelo, que corre hacia Chile, y que al tratarse de cursos de agua muy torrentosos es pasible de inundaciones.

La construcción de la represa acrecentaría esos riesgos al acumular un volumen de 170 millones de metros cúbicos de agua y la formación de un lago artificial de unas cinco mil hectáreas. La nueva obra, que embalsaría el río hasta la cota 170 metros, alcanzaría una capacidad instalada de 320 MW.

El impacto de esta gigantesca estructura se observará también en la flora y fauna del lugar con la pérdida directa de bosques que quedarán bajo el agua y la consecuente desaparición de las especies animales.

Pero será a escala social donde los efectos se sentirán de manera más alarmante. En el lado chileno, la creación de un embalse de cinco mil hectáreas significará la pérdida de poblaciones enteras, campos agrícolas, zonas de pastoreo y lugares históricos como El Portón, El Balseo, La Pasarela y Primer Coral.

"Es un proyecto que tiran técnicos sin tener en cuenta a la población. Entonces los datos técnicos se tiran en una computadora, pero se olvidan de todos los datos culturales, de lo que es el aspecto histórico, el aspecto social; es otra vez el interés económico primando sobre el interés social", puntualizó Nebbia.

A esta grave crisis económico, social y ambiental se le agrega el conflicto interjurisdiccional debido a que por más que las leyes autorizan el uso de las aguas de una cuenca, sin considerar si ésta es compartida o no, es necesario tomar en cuenta la posibilidad de una protesta de cualquiera de las comunidades que comparten el recurso, si no se consulta a los posibles afectados previo a la realización del proyecto.